Un estudio elaborado por investigadores de la Johns Hopkins University de Baltimore respalda que la lumbalgia puede estar causada por obstrucciones en los vasos sanguíneos como consecuencia de malos hábitos como el tabaquismo, la hipertensión o un nivel alto de colesterol.
Los fumadores pueden sufrir una deshidratación precoz de los discos especialmente lumbares lo que va a derivar en discopatías o posible dolor lumbar pudiendo terminar con hernias del núcleo pulposo.
Esta degeneración de los discos intervertebrales se debe a la disminución del aporte de oxígeno y otros nutrientes por un déficit de vascularización.
Otras posibles causas son :
Aumento del daño estructural en las vértebras y una mayor degeneración de los huesos, por lo que puede favorecer la osteoporosis. Esto debe ser tenido en cuenta en mujeres con osteoporosis que puede empeorar con el tabaquismo.
Afectación de las raíces nerviosas incrementando el riesgo de dolor radicular.
Mayor probabilidad de tos crónica y más daño por presión repetida sobre nuestros discos.
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