🔹Evitar la deshidratación especialmente en verano y tras la práctica deportiva . Beber aunque no se tenga sensación de sed intensa .
🔹Realizar estiramientos de gemelos, isquiotibiales y de la musculatura del pie. Consulta a tu fisioterapeuta o entrenador personal para que te enseñe de que manera estirar tus mús ulos correctamente .
🔹Realizar masajes sobre la musculatura espasmada. Usa una pelota o tus propias manos y alguna crema de masaje deportivo.
🔹 Sumergir en agua tibia nuestras piernas para calmarlos.
🔹Valorar nuestro aporte alimenticio de sodio, potasio y magnesio con análisis de sangre específicos.
🔹Revisar nuestra vitamina D visitando a nuestro médico de cabecera.
🔹 Llevar una dieta equilibrada y variada. Si lo necesitamos, consultar a un nutricionista para que te pueda orientarte.
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